La sobreventa, el terror de los viajeros

Para un viajero esporádico, de los que no acostumbran a tomar un avión más de una vez al año, puede resultar incomprensible que una aerolínea haga una sobreventa de boletos y que esto tenga como consecuencia que alguien deba quedar fuera del vuelo.

Lo cierto es que es una práctica común, y más importante, es una práctica legal aunque poco supervisada en muchos países.

Pese a esto, por un principio de autorregulación, las mismas aerolíneas han aceptado que una falla provocada por ellas mismas, como la mencionada, debe ser recompensada con una indemnización para el cliente afectado.

Donde no hay un acuerdo es en el tipo de retribución que darán, pues queda a criterio de la aerolínea y dependerá de si «el sacrificado» es voluntario u obligado.

En su blog, la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA, por sus siglas en inglés) lo que recomienda es consultar a la aerolínea sobre sus políticas de compensación:

Se puede dar una sobreventa en los vuelos, existiendo una ligera posibilidad de que no se cuente con disponibilidad de asiento en un vuelo incluso si cuenta con reserva confirmada. En la mayoría de los casos, si el embarque es denegado involuntariamente, usted tendrá derecho a una compensación.  Cuando la regulación aplicable así lo requiera, el transportista debe solicitar voluntarios antes de denegar el acceso involuntario de embarque.  Verifique con su transportista las normas completas sobre el pago de compensación por embarque denegado (DBC) y sobre la información de las prioridades de embarque. – IATA

Sobreventa regulada

La Unión Europea es talvez la región que tiene mayor regulación a esta práctica, y hasta ha reglamentado el valor de la retribución por cada billete (o boleto, como decimos de este lado del Atlántico) según la distancia del vuelo frustrado.

Cuando hay sobreventa en Estados Unidos, el Departamento de Transporte (DOT, por sus siglas en inglés) solicita que las aerolíneas pidan a quienes no tengan prisa que cedan sus asientos voluntariamente, a cambio de una indemnización. Los viajeros a quienes se les deniegue el embarque en contra de su voluntad  también tienen derecho a una indemnización y con pocas excepciones, que puede ascender hasta los $800. Eso sí, solo si el cambio de vuelo es superior en 1 hora al previamente fijado.

Si decide organizar su transporte por su propia cuenta, podrá solicitar un reembolso por “denegación de embarque no voluntario” por el billete del vuelo al que se le denegó el embarque. En esencia, la indemnización por denegación de embarque es un pago por la molestia ocasionada. – DOT

Y en Latinoamérica en muchos casos depende de la política de la aerolínea y la regulación de cada país:

Avianca: no usa dinero como compensación sino certificados de viaje.

Copa: se compromete a dar «una compensación y comodidades y ser confirmado en un vuelo posterior». No especifica monto.

Aeromexico: Las reglas completas para el pago de una compensación y las prioridades de abordaje de cada aerolínea están disponibles en todos los mostradores de boletos del aeropuerto y lugares de abordaje.

(En México a empresa involucrada debe dar al pasajero afectado una indemnización que no sea inferior al 25% del precio del boleto o de la parte no realizada del viaje)

LAN: pasajeros tendrán derecho a una indemnización justa, de acuerdo a la ley establecida, que garantizan un trato equitativo.

(A inicios del 2014, el Congreso chileno aprobó por unanimidad ley que establece derechos a favor de los pasajeros de vuelos comerciales, donde especifica la compensación según la distancia).